SEIS PIEZAS FÁCILES. LA FÍSICA EXPLICADA POR UN GENIO. RICHARD FEYNMAN.

Este pequeño libro de la editorial Critica de Barcelona publicado en la colección Drakontos bolsillo recoge posiblemente las explicaciones más bellas y claras que se puedan encontrar sobre determinadas áreas de la física.

Su autor, Richard P. Feynman (Nueva York 1918 - Los Angeles, 1988), premio Nobel de física en 1965, fue uno de los científicos de referencia en la segunda mitad del siglo XX. 

Feynman no participó en la fijación de los cimientos de la física moderna, pero partió de esos cimientos que eran la teoría de la relatividad y la mecánica cuántica y construyó sobre ellos el primer piso.

Richard P. Feynman adquirió renombre inicial con su trabajo sobre las partículas subatómicas conocido como  electrodinámica cuántica (QED). Su acercamiento intuitivo a los problemas físicos dio como resultado la creación de sus diagramas epónimos con los que se ayudaba en la resolución del complejo aparato matemático asociado a la teoría cuántica de campos, hoy ampliamente utilizados.

En el Instituto Tecnológico de California, el Caltech, le encargaron a Feynman la impartición de un curso de física para la recepción en la universidad de los futuros científicos. Después de dedicarse 3 años al proyecto, dejó plasmado en sus “Lecciones de Física” (1965) el enfoque de sus clases. La claridad en la explicación de los conceptos físicos, así como la sencillez en la exposición y el entusiasmo que Feynman dejó plasmados en estos escritos hace que gran parte de la comunidad científica lo considere uno de los maestros de la enseñanza de la física.

El libro que presento, “6 piezas fáciles. La física explicada por un genio” es una selección de las Lecciones pensada para ser leída por un público más extenso interesado por el mundo de la ciencia.

Su sugerente contenido es el siguiente:

1.       Átomos en movimiento

2.       Física básica

3.       La relación de la física con las otras ciencias

4.       La conservación de la energía

5.       La teoría de la gravitación

6.       Comportamiento cuántico

A mí me lo recomendó un buen amigo y yo lo recomiendo aquí.

JEKYLL Y HYDE. UNO BUENO MUY BUENO Y EL OTRO MALO MUY MALO.

Así serían las dos personas que según Harry Jekyll llevamos dentro.

(El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde. Spencer Tracy, Ingrid Bergman, Lana Turner. 1941)

Viendo ultimamente dos versiones cinematográficas de la novela de Robert Louis Stevenson el extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde, he comprendido que los intereses del doctor Harry Jekyll eran perfectamente nobles en su planteamiento.

Si dentro del mismo hombre conviven dos seres completamente diferentes, uno orientado a la bondad y el otro a la maldad, él buscaba la separación de los mismos para que el hombre bueno pudiera realizarse dentro de sus ideales y consiguiera los mayores objetivos de bondad sin el lastre que el hombre malo le supone.

( El hombre y el monstruo. Rouben Mamoulian. 1931)

Por otra parte, el hombre malo, al ser consciente de su maldad y verla con total claridad se orientaría inmediatamente a la búsqueda del bien. O sea que también se convertiría en un hombre bueno.

Dicho y hecho el buen Harry Jekyll se entrega a la investigación para conseguir la pócima que conseguiría estos efectos. En la novela, esta pócima se consigue pero por diversas circunstancias el experimento no resulta como el científico lo había pensado.

Como en la vida real ocurre de manera habitual, Stevenson hace morir al científico transgresor del statu quo aceptado sin llegar a poder comprobar su teoría hacia la bondad expresada al comienzo.

Hoy resulta simple el planteamiento de Stevenson pero todavía esta fábula sigue viva en el imaginario colectivo como representación clara de la dualidad de la voluntad humana que puede dirigirse hacia la bondad y  la maldad de la forma más caprichosa.

Así nos va!

EL ENIGMA DE FERMAT. LO SÉ PERO NO TE LO DIGO.

    ¡Pitágoras tenía razón! en un triángulo rectángulo, la suma del cuadrado de los catetos es igual al cuadrado de la hipotenusa.

      Pero.... durante cientos de años la humanidad no había encontrado algo similar cambiando el cuadrado por otro número natural cualquiera. Esto es, no se había encontrado ninguna terna de números enteros a,b,c tales que uno de ellos elevado cubo, a la cuarta,... fuera igual a la suma del cubo, cuarta,... de los otros dos. ¿Existían tales números? 

     No se había encontrado ninguna terna de números enteros, pero... no se había demostrado que era imposible encontrarlos. Demostrarlo significaba que se podía dejar de buscar estas ternas de valores, porque sencillamente,.. no existían.

     A Pierre de Fermat, jurista francés del siglo XVII, conocido en el mundo matemático como el príncipe de los aficionados, le gustaba entretener su tiempo con problemas matemáticos como el que hemos presentado.

    Pues bien, Don Fermat, en su cuaderno de notas, dejó escrito que había encontrado esta demostración. 

    Lo tremendo es que no escribió la demostración, sino que, en su lugar, dejó escrito: “He descubierto una demostración maravillosa de esta afirmación. Pero este margen es demasiado angosto para contenerla". Vaya, un "lo sé pero no te lo digo".

     Con ello, y después de haber sido ésta una de las cuestiones más perseguidas por los matemáticos desde la antigüedad, lo fue aun más como consecuencia de esta afirmación realizada en el siglo XVII.

     Y desde entonces, la Humanidad ha tenido que esperar a que, en los años finales del siglo XX otro matemático, Andrew Wiles, haya podido explicar ante el mundo entero la demostración que él ha encontrado de la afirmación de Fermat.

     Todo esto, y mucho más, está explicado en un maravilloso libro de Simon Singh, "el enigma de Fermat" cuya lectura os recomiendo pues es muy divulgativo y realmente fácil de seguir.

     De edición más reciente podéis encontrar también sobre este mismo tema el de Carlos Dorce, "Fermat y su teorema"..

Os recomiendo estas lecturas. Seguro que este viaje os resultará tan fascinante como a mí.

EL VIAJE ALUCINANTE. DE LA IMAGINACIÓN AL FUTURO.

     Esta semana he podido conocer a Michio Kaku. ¿que quien es Michio Kaku? Pues un físico teórico extraordinario, autor de una teoría según la cual todo lo que existe, incluido cada uno de lo componestes de las céluas de nuestro cuerpo, no sería otra cosa que una especie de vibración. Así, según las posibles diferentes frecuencias de vibración, se explica la existencia de todas las subpartículas que componen la materia.

     Algún día sabremos si todo esto se puede comprobar pero, de momento, hay muchos físicos y científicos trabajando en estas ideas y haciéndolas avanzar.

     Michio Kaku habló en una conferencia organizada por Movistar en Madrid y se explayó presentando  situaciones, artilugios e inventos que nos acompañarán en los próximos años: paredes del domicilio convertidas en pantallas hablando entre ellas, inodoros que nos harán un análisis de orina según hagamos la correspondiente visita, trasplantes de tejidos y órganos recién "fabricados" en la habitación de al lado, y así hasta mil ejemplos que nos hicieron también vibrar a todos.

     Alucinante! como el recuerdo que nos acercó de aquella película de 1966, Fantastic Voyage ( El Viaje Alucinante) en que Raquel Welch se metía en un cuerpo humano mediante un nanosubmarino (entonces no lo llamaríamos así) para hacer una intervención de urgencia y salvar la vida del espía bueno.

     Qué bueno es poder imaginar y jugar con el futuro y con lo posible que la ciencia ayuda a entrever. Lo sabemos todos los que disfrutamos con ello.

     Un saludo .... vibrante.